Como coach transformacional, a menudo veo clientes que están constantemente presionados para estar felices y positivos todo el tiempo. Todos los días son bombardeados con mensajes altamente positivos en las redes sociales e incluso se sienten forzados por sus seres queridos, compañeros de trabajo e inclusive por sus jefes. Pero la verdad es que nuestras emociones son complejas y diversas. Está bien sentirse triste, enojado o frustrado a veces. De hecho, permitirnos sentir estas emociones es saludable y necesario para nuestro bienestar mental.
La psicología positiva valora el bienestar y la felicidad, pero también reconoce la importancia de comprender que la búsqueda constante de la felicidad puede no ser realista ni saludable. Abrazar el espectro completo de emociones y crear una vida equilibrada puede conducir a un bienestar
más sostenible. Es fácil criticarnos a nosotros mismos por no ser lo suficientemente felices o positivos, pero la búsqueda de una felicidad constante e interminable puede crear expectativas y presiones poco realistas, lo que lleva a sentimientos de insuficiencia, frustración y decepción.
Aquí hay algunas razones por las que la búsqueda constante de la felicidad puede no ser una meta
realista a nivel personal:
Escrito por la Coach Ángela Quiñones Terán, Miembro activo ICF Colombia, puedes seguirla acá